Soy lo que las palabras me dejan ser. Estructurada, sensible, racional, inofensiva, hábil y astuta. Son lo que ellas nominan de mí, tienen el poder de hacerlo. Por eso mismo,
podés desmigajarme, desarmarme. Des-hacerme en palabras, llegar a lo más profundo de mi ser, por medio de una acción discursiva. Y ese des-hacerme te da la posibilidad de volverme a hacer como quieras. Porque aunque vos no te hayas dado cuenta, estás ganando una batalla que ni siquiera sabías que estabas batallando.
Soy un rompecabezas, y como tal voy a romperte la cabeza. Dinamitar tus ideas, llenar de adrenalina tus pensamientos. Y te voy a dejar ahí parado, en el mismo lugar que ahora, pero con una duda. Te voy a dejar pensando, pensando: ¿qué es lo que hace? Y yo simplemente voy a poder decirte que soy así, que eso no tiene explicación, que la señora natura me concibió así.
Por eso, te puedo volver loco. Esto se debe a que nadie sobrevive al paso de dos Yoes. La vida no es tan cruel ni tan buena, como para permitirlo. Porque si bien puedo volverte loco en el mal sentido, la recompensa de lo bueno que soy, es enorme. Y esto no lo digo porque yo misma sea yo. Te lo digo porque la reflexión me hace decírtelo.Dos Yoes, dos personas como yo –de la misma forma de ser, describen lo que piensan, se descomponen en palabras, vuelven a nacer.
Igualmente, ojalá que nunca tengas que pasar por el paso de dos Yoes. Dios no lo permita. Que un solo Yo te vaste. Te alcance. Te complete. Te sublime. Te vaste. Y como me da miedo el futuro que vendrá te digo lo que dice Ismael. No me sueltes.
podés desmigajarme, desarmarme. Des-hacerme en palabras, llegar a lo más profundo de mi ser, por medio de una acción discursiva. Y ese des-hacerme te da la posibilidad de volverme a hacer como quieras. Porque aunque vos no te hayas dado cuenta, estás ganando una batalla que ni siquiera sabías que estabas batallando.Soy un rompecabezas, y como tal voy a romperte la cabeza. Dinamitar tus ideas, llenar de adrenalina tus pensamientos. Y te voy a dejar ahí parado, en el mismo lugar que ahora, pero con una duda. Te voy a dejar pensando, pensando: ¿qué es lo que hace? Y yo simplemente voy a poder decirte que soy así, que eso no tiene explicación, que la señora natura me concibió así.
Por eso, te puedo volver loco. Esto se debe a que nadie sobrevive al paso de dos Yoes. La vida no es tan cruel ni tan buena, como para permitirlo. Porque si bien puedo volverte loco en el mal sentido, la recompensa de lo bueno que soy, es enorme. Y esto no lo digo porque yo misma sea yo. Te lo digo porque la reflexión me hace decírtelo.Dos Yoes, dos personas como yo –de la misma forma de ser, describen lo que piensan, se descomponen en palabras, vuelven a nacer.
Igualmente, ojalá que nunca tengas que pasar por el paso de dos Yoes. Dios no lo permita. Que un solo Yo te vaste. Te alcance. Te complete. Te sublime. Te vaste. Y como me da miedo el futuro que vendrá te digo lo que dice Ismael. No me sueltes.
1 comentario:
"Cómo no recordarte hace apenas dos años, cuando eras la princesa de la boca de fresa, cuando tenías aun esa forma de hacerme daño..."
Pero como olvidar que anotamos frases para vivir, dejar vivir y HOY DESVIVIR. Para hacerle frente al miedo. Miedo tonto, colectivo, cultural... Absurdo. ¿Futuro? Hace un segundo el futuro llegó y el minuto que se disolvió, quedó en el pasado. Continúa irrumpiendo el tiempo sobre mí, sobre mis palabras. "El futuro llegó hace rato...". Qué más queda por decirle a esas frases paradiscursivas que presentas. Aprendemos día a día: a volar, a valorar y a contemplar la tranquilidad. No importa dónde no hay, sabemos donde encontrarla. Quizá, ahí, donde el polvo y la humedad también deciden reposar por años. Reposar dejando una marca imborrable. Nosotros cuan polvo y humedad descansaremos en los huecos de una hoja. En la esquina de una oración. En la ventana de una sanría...que no sangra. Brota, como tus sentimientos. Como las ganas de ser y ser cada día un poco más feliz que ayer. ¡Voy! hacia adelante. No miro para atrás. No quiero volver. No estamos acá porque un tren de paso nos trajo; estamos porque el tren de la vida para en cada estación y sale a nuevos encuentros. Es así que siempre te busco. Busco este refugio de anden en anden que se repite o se reformula; pero siempre está esperándonos. Nunca nos defrauda.
Te quiero.
F.C
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